Garett vive plácidamente en el castillo del rey, ya que su antigua ciudad fué devastada por Orochi. Entonces un soldado le dice a Garett que el rey lo necesita para una misión de protección: La princesa está de viaje en el país de los limos, debe ir al puerto y custodiar a la princesa.
Nuestro protagonista viaja hasta el puerto, preparado para cumplir su misión. En ese momento, uno de los discípulos de Eefrit lo aborda, aunque no es rival para Garett. Para su desgracia, aparece un segundo invitado no deseado, un ninja con un traje negro y amarillo que consigue raptar a la princesa ante los ojos atónitos de Garett.
Sin saber que hacer, Garett pide ayuda a un viejo amigo, el clérigo Herunter. Con él, viajan hasta el lugar en el que tienen cautiva a la princesa y, tras algunos enfrentamientos contra los ninjas, Garett y su amigo consiguen rescatarla y llevarla al castillo en donde vive.
Pese a eso, Garett se pregunta quienes serán estos ninjas capaces de romper la paz mundial que había logrado en la primera parte, por lo que decide investigar a estos sujetos extraños. Tras algunos viajes en los que Garett y Herunter tienen que enfrentarse a las múltiples trampas de los ninjas y de los subordinados de Eefrit, finalmente llegan hasta un castillo oculto en lo más profundo del infierno.
El grupo aborda el castillo, custodiado por uno de los mejores ninjas, y lugar de origen de un círculo mágico de transporte, por el cual vinieron todos estos ninjas y por el que se están a punto de aparecer un ejército más.
El equipo consigue desactivar ese círculo mágico, pero aún tienen que detener al gobernante supremo de un mundo paralelo que ha venido para conquistarlo todo. Tanto a Garett como a su grupo le esperan un duro enfrentamiento contra ese conquistador misterioso.
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